La startup murciana especializada en sistemas de pedidos online para restaurantes, inicia su expansión internacional con México como primer destino y puerta de entrada al continente americano.

Hace casi dos años que la foodtech española empezó a dar servicio en México, y desde entonces ha ido adquiriendo clientes en Colombia, Argentina, Chile y Perú. Según explica Salvador Alcaraz, responsable de Marketing en Readyme.app, “no fue algo intencionado, llegaron de forma orgánica y estaban decididos a usar nuestros productos, incluso cuando la tecnología no estaba del todo adaptada a sus países. Sin embargo, llevamos meses trabajando para poder dar servicio de forma totalmente funcional allí, y eso vamos a empezar a hacer”.

Aunque los esfuerzos comerciales de la empresa siempre se han localizado en España, la creciente demanda proveniente de Latinoamérica les hizo replantear la estrategia y acelerar el momento de la expansión. “Teníamos previsto empezar a vender fuera de España a principios de 2023, pero viendo la cantidad de oportunidades que ya estamos rechazando en diferentes países del centro y sur de América, hemos adelantado seis meses nuestros planes de expansión”, añade Antonio Moreno, CEO de Readyme.app.

A nivel de desarrollo no ha supuesto grandes dificultades ya que, según afirman en la compañía, la tecnología está suficientemente madura y solo necesitaba unas adaptaciones que pudieron llevarse a cabo en cuestión de pocos meses. El verdadero reto, creen, es conseguir adaptar sus propios procesos y cultura de empresa a la cultura de esos países, ya que, por el momento, no hay planes de abrir oficinas físicas allí.

Esta es una de las razones por las que México será el primer destino para abrir mercado en Latinoamérica. “Es un país donde la adopción de tecnología europea suele ser bastante elevada, y hay además una gran cercanía cultural con nuestro país.” afirma Salvador. En una primera fase, los esfuerzos se concentrarán en la capital, y de ahí al resto del territorio.

El mercado de la comida a domicilio no ha dejado de crecer a buen ritmo desde la crisis del Covid-19, y América Latina no es una excepción. Esto, sumado a las difíciles situaciones que están experimentando algunas de las grandes apps de delivery como Glovo, Uber o Deliveroo para rentabilizar sus modelos de negocio, genera una interesante oportunidad para empresas más pequeñas con niveles de crecimiento mucho más modestos, pero modelos de negocio más sostenibles.